Este año visitamos Roma un grupo de gentes singulares y dispares de la costa Levantina. Estuvímos casi una semana de turismo por la capital italiana, y con la idea de acudir al derbi romano. En cuanto al "viaje turístico" muy bien. Allí el movimiento ultra se vive con gran intensidad, nada que ver con España. Se respira grada por todos los rincones. Mucha gente con material de su grupo por la calle. Lo extraño que vimos fue la forma de vestirse de gran parte de personas ya que podían combinar una harrington, sudadera merc, y gorra burberrys, con las Nike Shox, comunmente llamadas "muelles". Nos chocó bastante. Y por supuesto que allí todo el mundo viste, lo que aquí llamaríamos, "cantoso". Vas por la calle y parece que todo el mundo es ultra. Nada más lejos de la realidad. Allí todo el mundo viste así, y nada tiene que ver con pertenecer al movimiento.
En cuanto al partido nos colocamos en la tribuna Monte Mario, puesto que de la Tevere no quedaban entradas. Pudimos observar, desde relativa cercanía, un buen grupo de personas dándose de hostias, con estética casual, que incluso alguno de ellos termino el combate en el mismísimo cesped del Olímpico de Roma. Acabarón ellos solitos la pelea sin ningún entrometimiento de la madera. Algo imposible aquí en España. En la tribuna Tevere se observaron grandes "Scontris", muchas carreras y muchas personas rodando. Y de nuevo se repitieron los acontecimientos de la movida previa...la policía de campo y playa. Ellos solitos se iban y venían a su antojo, no portando armas (tan solo cinturones) y jugando limpio. La madera se dedicaba a separar dando algún que otro porrazo para ganarse el jornal y poco más. Así daba gusto. De hecho nos llegamos a replantear si todo eso era un escenario ficticio en el cual todos los actores sabían lo que iba a acontecer de antemano, firmando una tregua previamente, ya que por muchos videos que hubiésemos visto en Youtube lo veíamos irreal.
Del partido no nos preguntéis como fue porque no tenemos ni puta idea. Ni si quiera me acuerdo como quedaron. Ganó la Roma y poco más. Los cánticos fueron bastante irregulares en ambos grupos. Animaban cuando ganaban o iban empatando y cuando perdían dicho grupo no se arrancaba ni por soleares. Un tanto extraño. Si se quiere ir a Roma para escuchar buenos cánticos recomendamos que se vaya a partidos algo más "intrascendentes", para poder escuchar tanto a la Curva Sud, como a Irriducibili, en todo su esplendor.
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